Parque de San Pío X

10.02.2014 00:57
Un día tan hermoso como un jueves en la tarde, para ser exactos las 5 de la tarde, no hace frío, ni tampoco calor, el clima está tan pero tan perfecto que decido ir a dar un paseo. 
 
Llego al parque de San Pío X, un parque solitario, a lo lejos está el templo, hay muchos árboles y pocas bancas para tomar asiento. Puedo ver a una señora de edad adulta en una silla de ruedas, está con otra mujer, la cual parece ser su hija.
 
Yo paso caminando y llego al otro extremo de este parque. Sí hay bancas para sentarme, pero no tengo ganas de estar en un pedazo de metal, quiero estar más en contacto con la naturaleza, me acuesto en el verde y fresco pasto. Me pongo espalda abajo y veo el cielo azul y a sus alrededores el pasto.
 
No puedo pedir nada más, es una tranquilidad tan perfecta, se siente un ambiente tan seguro y limpio al mismo tiempo, lugares como este hacen la estancia en la vida un poco más amigables.